Es difícil describir el efecto
que tiene una película de cinemugre en el cuerpo y la mente de una persona.
Todo el mundo al principio dice que ellos nunca verían este tipo de cine, sin
embargo, en cuanto lo prueban es difícil que lo dejen. Lo podríamos describir
como una especie de droga (probablemente una de las más adictivas que existen).
Hace años incluso yo era reacio a
visionar esta clase de cine pero poco a poco me fui dando cuenta de lo
increíblemente divertido que puede llegar a ser. A pesar de que siempre te
puedes esperar lo que va a suceder a continuación, también hay alguna sorpresa
inesperada, así como los momentos “Pero… ¿Qué me estás container?” (que podéis
ver en detalle en las radiografías de nuestro compañero el Dr. H).
¿Y qué decir de la gran variedad
de géneros que nos encontramos dentro del cinemugre?
Podemos encontrarnos las típicas
películas de zombies, las de ataques de animales (mutados o no), los ya
clásicos slasher,…
Alguno de estos generos te pueden
gustar más o menos pero lo que sí es seguro es que vas a disfrutar viéndolas,
comentándolas e incluso recordándolas cuando pase algún tiempo.
Hace
tiempo leí un artículo en el que decían que beberse una cerveza bien fresquita
activaba la enzima que hace que el ser humano sienta felicidad. Pues bien, yo
tengo cada vez más claro que este tipo de películas tienen el mismo efecto. Así
que ya sabéis, si queréis ser felices nada mejor que una cerveza bien fría y
una buena película mugrienta.
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